¿LOS IDEALES O EL AMOR?
La nostalgia, el desasosiego y la incomprensión se suben al escenario del teatro Arlequín en “Mi Princesa Roja: El Musical”, dirigido por Álvaro Saénz de Heredia. | Por Clara Sánchez.
Dice Pérez-Reverte que “si a un joven no le das historia, lo estás dejando huérfano de memoria”. Precisamente, “Mi Princesa Roja: El Musical”, representado en el Teatro Arlequín, es un canto a la memoria colectiva de este país en sus años más cruentos; la guerra civil. Álvaro Saénz de Heredia, el director, guionista y productor del musical, firma una visión del conflicto como jamás antes la habían contado. Se trata de una profundización sobre la figura de José Antonio Primo de Rivera. Según el autor, su vida pública y personal fue, cuanto menos, apasionante.
“Mi Princesa Roja” es una historia que comienza por el final pese a que todos los espectadores saben cómo acabará. Música y originales recursos audiovisuales se reúnen para contar hechos históricos del que fue, según Heredia, unos de los dirigentes más incomprendidos. Instantes antes de su fusilamiento, José Antonio Primo de Rivera tiene un encuentro con la muerte, que se presenta bella y misteriosa, incluso irónica. A modo de conversación, la vida de este singular personaje se muestra ante los ojos del público sin tapujos ni secretos, con una protagonista principal: Elisabeth Asquith; su princesa roja. La guerra civil se palpa en el ambiente y la población se politiza. Los colores Rojo y Azul gobiernan las ciudades, los pueblos y hasta el corazón de la gente. Pero para José Antonio, el rojo adquiere un nuevo significado; el de la pasión, la ternura y sobre todo, el del amor prohibido. Además, la obra indaga sobre cómo José Antonio, fundador de la Falange, se lleva tan bien con la izquierda española y es reacio a la lucha armada.
Lo original del espectáculo reside en los recursos audiovisuales que emplea. El escenario cambia y con una grandísima puesta en escena a base de fotografías, técnicas cinematográficas y artes escénicas, sitúa al público en la convulsa década de los 30. A través de una pantalla, se recrean más de 35 localizaciones: el Teatro de la Comedia, el emblemático Palacio de Villahermosa (actual Museo Thyssen) o el Ateneo de Madrid, entre otros. Esto otorga a la obra un gran dinamismo y belleza técnica que se entremezcla con bailes expresivos y música vibrante, que a veces roza la psicodelia pero sin que esto signifique la caída a la excentricidad estética. Así, el espectáculo emociona de una forma muy intensa por su ritmo elevado de concatenación de acontecimientos.
El elenco es cuanto menos, estelar. José Antonio Primo de Rivera está encarnado por Juan Carlos Barona, conocido por protagonizar musicales como 'El Fantasma de la Ópera' o 'El diario de Ana Frank'. Forma un dueto dramático espléndido con Irene Mingorance, a quien se pudo ver en “A” y que esta vez, protagoniza a la princesa roja. Además, Sonia Reig se disfraza de la muerte de una manera poco convencional que supone un punto de inflexión cada vez que aparece en escena. A estos tres personajes principales, se les unen más de 10 artistas que ayudan a recrear la estupidez de una guerra que dividió a un país. Por otra parte, la enorme caracterización de vestuario añade la guinda perfecta al pastel dramático.
Álvaro Saénz de Heredia, con la ayuda de los compositores Mario Gosálvez y Andrés Saénz de Heredia, recrea el mundo turbulento de José Antonio Prima de Rivera, su princesa roja, Azaña, Queipo de Llano e incluso Federico García Loca. En definitiva, un precioso homenaje a la vida de aquellos personajes en un contexto donde no hubo ni vencedores ni vencidos, sino solo personas superadas por el caos de las circunstancias.
:: “Mi princesa Roja, El Musical”, dirigido por Álvaro Saénz de Heredia, puede verse en el teatro Arlequín hasta el 31 de Diciembre. Martes a jueves a las 20:00 horas, viernes y sábados a las 18:00 y 20:30 horas y domingos a las 18:30 horas.
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