UNA OPORTUNIDAD DE CONOCER UNA OBRA MARAVILLOSA
Tras triunfar el pasado verano, el musical más representado y más premiado, "El fantasma de la ópera", regresa a Madrid con cuatro únicas representaciones. Cover Set tuvo el placer de acudir y os recomendamos el espectáculo. | Por Jesús Vergara.
El sábado 30 de enero tuve la
oportunidad de ver el espectáculo musical "El fantasma de la ópera" de
la productora Smedia. El concepto de este show es el de un
concierto sinfónico teatralizado pero sin apenas montaje escénico ni escénico.
Primero he de decir que la orquesta estuvo
muy bien, muy acertada y bien dirigida. Este musical, del compositor
Andrew Lloyd Webber, es de una calidad musical sublime, se llega a
considerar por los expertos como la actualización de la
ópera.
Ahora bien voy a analizar las cosas que funcionan
y las que no en este montaje de Smedia. En el casting, la protagonista que hace
de Christine, está sublime, como su personaje requiere: dulce, vocalmente impecable, su línea de canto es natural y
pura, cercana al bel canto. Actúa muy bien, además de brillar
por encima del resto del reparto. Otro personaje que está perfectamente
interpretado es el de la soprano "la prima dona”, vocalmente está muy
acertada, muy correcta, a nivel actoral perfecta, interpretando su papel de
la típica soprano ególatra e insoportable.
Raoul de Chagny, el personaje
que hace de enamorado de Christine, vocalmente está correcto, más no brilla,
los graves muy engordados le quitan dulzura a su línea de
canto, quizás sería mejor susurrarlos, como lo cantan en Brodway.
Los personajes de productores
y Madame Girly actoralmente están acertados.
Lo que no me gusto, musicalmente si bien la
orquesta y Christine estuvieron perfectos, el resto del reparto fue un
desastre, en los dúos, sextetos y partes polifónicas,
no afinaban ni a la de tres, no empastaban las voces, era un duelo
de griterío insoportable, no se les entendía la letra y un
sinfín de errores que no esperas escuchar en un musical de la
Gran Vía y menos en concierto que esperas aún más calidad musical. El
papel del tenor del teatro tampoco me gustó, no es lo mismo cantar un
musical que una zarzuela de José Luis Moreno. Que los coros fueran
grabados y los actores no hicieran ni por mover los labios tampoco es un punto a su favor... Por ultimo, lo que
menos me gustó fue el protagonista masculino, no se le entendía lo
que cantaba. Conozco la partitura, sé de la dificultad
del personaje, musicalmente toca los registros más extremos y
vocalmente es muy complicada, pero él técnicamente no estaba, no
afinaba, estaba engolado, los agudos muy chillados y constreñidos,
no se puede cantar así este personaje. Recordemos que él es un incomprendido,
dolido con la sociedad que por sus deformidades lo discriminaron, pero él es
bueno, está intentando encandilar a Christine y no puede cantar a
grito pelado, eso es horrible, un desastre, ya que le costaba llegar a las
notas, y de la tensión muscular que ponía, se levantaban
los hombros porque cogía mal el aire. En fin. desacertado
protagonista masculino.
Eso si, cómo espectáculo es perfecto para disfrutar
en familia, escuchar una orquesta sinfónica y conocer una obra maravillosa.
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