Crítica de "El monstruo de colores" en el Teatro Alcázar de Madrid


Un espectáculo lleno de aprendizaje y color que no deja 
indiferente a nadie

"El Monstruo de colores" es una obra literaria de Anna Llenas con más de 300.000 copias vendidas y traducido a 16 idiomas que cuenta con una puesta en escena llena de poesía visual que nos ayudará a conectar con cada emoción. Un espectáculo de títeres, música y colores para hacer viajar a los más pequeños y no tanto, por el mundo de las emociones y les permite identificar y poner nombre a lo que sienten en cada momento.

Y de ello podemos disfrutar en el Teatro Alcázar de Madrid en su adaptación teatral de Tutatis Distribuidora.

La puesta en escena nos presenta a un monstruo con un revoltijo de colores que representan las diversas emociones y que, gracias a la ayuda de su amiga Nuna, aprenderá a identificarlas y a ponerlas en orden.
Este pequeño monstruito es una herramienta (diría yo casi que vital) para nuestros pequeños de la casa ya que nos ayuda a poder explicarles que les está sucediendo en cada rabieta, pesadilla... O incluso cuando están tristes. Esto solo es un ejemplo, ya que la realidad supera a la ficción y, de verdad, ayuda mucho a los que tenemos hijos, eso si: lo podéis poner en práctica tíos, primos, abuelos... Vamos, todos los que tengáis cerca a un peque hecho un lío con sus emociones.

El espectáculo está lleno de música, elementos muy llamativos y, sobre todo: color. Es un espectáculo que no deja indiferente a nadie ya que los adultos adquirimos un aprendizaje cognitivo que pondremos en práctica  y los pequeños quedan eclipsados.

"El monstruo de colores" está en el Teatro Alcázar de Madrid con funciones todos los domingos a las 12:30h y hasta el próximo 2 de abril.

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